En los años '30, en plena crisis económica y social norteamericana, un hombre llevó esperanza a millones de personas que se habían caído del sistema y buscaban una segunda oportunidad. El boxeador James J.Braddock es una leyenda de conmovedora humanidad (o eso aseguran) en los Estados Unidos.
La nueva película de Ron Howard (director al que se sigue nominando y premiando de acuerdo a la actual tendencia de la Academia, si bien hace un tiempo que no ofrece nada nuevo) pretende reflejar todo esto, y se queda meramente en un destello espejado. Las caracterizaciones son forzadas, construidas más que nada en base a estereotipos que el cine ha explotado hasta el hartazgo.
No termina de convencer este James Braddock, no por generoso y altruista menos humano... El problema es que es demasiado altruista, demasiado generoso para ser humano. Su némesis en el cuadrilátero es Max Baer (Craig Bierko), al que se presenta como un terrible oponente no sólo por su pericia como boxeador, sino por su cinismo y total desprecio por cualquier vida ajena.
Russell Crowe y Renée Zellweger, la pareja protagonista, no logran transmitir al espectador más que una serie de clichés sobre lo que debe haber sido un matrimonio de los años '30, con sus apuros económicos y desavenencias conyugales. Si bien está correctamente estructurada, toda la trama deriva previsible hasta en sus mínimos detalles . Sobresale, como siempre, el eficaz Paul Giamatti como Joe Gould, el representante de Braddock y responsable de su retorno al ring.
Estrenada en USA con cierto retraso para evitar la superposición con una película de similar temática (la multipremiada Millon Dollar Baby), El Luchador remite sin quererlo a la película de Clint Eastwood, aún cuando busca escaparle al tono duro e intimista, ofreciendo en contraposición un producto mucho más "amable", pero por lo mismo más edulcorado.
Es de prever pues, que este retraso en su arribo a las pantallas tiene mucho más que ver con la ambición de figurar en alguna terna con vistas a los próximos premios de la Academia hollywoodense. Que, por cierto, siempre se reserva algunas nominaciones para películas de este calibre.
Nuestra crítica: Esta película justifica el 60% del valor de una entrada
EL LUCHADOR (Cinderella Man) – 143 minutos – Apta para 13 años. Estreno en la ciudad de Buenos Aires: 8 de septiembre